El novillero poblano Héctor Gabriel Ferrer se impuso en la final de Descubriendo un Torero, Tercera Edición, que se ha llevado a cabo en la Plaza de Toros Arroyo, al cortar la única oreja del festejo; ello al sexto novillo, tras haber dejado escapar una oreja en el primero, debido a que falló con el acero.
Ha sido claro que Héctor Gabriel Ferrer quien ha defendido el título de triunfador del serial del año anterior, mantuvo un paso constante y al alza a lo largo del actual certamen, en el que su única mácula ha sido errar con la espada, lo que le hizo perder varios apéndices; no obstante, ha sido el novillero que desplegó mayores argumentos, evolución y expresión artística, tanto con los novillos que dieron buen juego, cuanto los que resultaron complicados.
Luego que en esta novillada sabatina le correspondieran primero (bueno), cuarto (falto de fuerza) en su lote, así como el sexto (bueno), que debió torear a consecuencia de la lesión que sufriera uno de sus alternantes, se alzó triunfador al obtener en el cierra plaza la única oreja que se concedió.
El primer novillo de la ganadería de José María Arturo Huerta, tuvo calidad, la cual fue aprovechada por el joven poblano para torear con un asentamiento y una seguridad que fue su constante a lo largo del festejo. Lo recibió con verónicas. Gracias al manejo de los toques, logró sacar el fondo del toro para alargar cada muletazo en tandas de calado. Terminó con bernadinas y varios viajes con el acero, lo cual le hizo escuchar un aviso.
El cuarto, de la ganadería La Joya, que hizo un vibrante papel ante el picador, tuvo poco fuelle por lo que Ferrer debió abreviar. Tras el percance de Sescosse, se hizo cargo de lidiar al sexto, de Santa María de Xalpa, un precioso jabonero que tuvo suavidad y recorrido.
Llevó a cabo una faena seria, con estructura. Remató tras varios viajes con la espada. Sin embargo, tuvo petición de oreja que fue atendida por el juez, de plaza. Se aclaró que más adelante el jurado calificador de esta plaza, determinará el nombre del novillero triunfador absoluto de este certamen.
Mariano Sescosse salió a jugarse el tipo ante un astado de Barralva que resultó áspero pero al que domeñó con firmeza para lograr tandas muy serias que le ganaron el reconocimiento del público. No obstante, el burel desarrolló peligro y le fue avisando que iba por él.
Mariano lo supo pero apostó fuerte hasta que el novillo le pegó una voltereta que lo dejó maltrecho. El zacatecano se mantuvo en el ruedo para matar a su enemigo al primer viaje. Se fue a la enfermería por su propio pie pero ya no le fue posible regresar a hacerse cargo del segundo de su lote, por haber sufrido un esguince de vértebras.
Román Martínez, es de esos novilleros con entrega a toda prueba, que le llega a la gente pero al que le urge manejar una mejor técnica para salir mejor librado de cada compromiso. Con el segundo, de Jaral de Peñas y el quinto de Xajay, ha perdido la oportunidad de triunfo ya que sus ansias lo rebasan.
No supo escuchar un consejo a tiempo y se aferró a seguir toreando al de Jaral de Peñas que tras dos fuertes encuentros con el picador, sangró en exceso y se echó en varias ocasiones en la arena. Con el de Xajay se llevó una golpiza, además de un desgarre en una pantorrilla. Terminó con una estocada que hizo guardia en el cuerpo del novillo y se retiró tras dos avisos.
El jurado designó como mejor novillo, precisamente al de Santa María de Xalpa, llamado “Bonito”, número 500 con 376 kilos.
FICHA DE FESTEJO
SÁBADO 8 DE OCTUBRE
PLAZA ARROYO. Final del Certamen Descubriendo un Torero, Tercera Edición. Casi lleno.
SEIS NOVILLOS de las siguientes ganaderías, de acuerdo a su orden de lidia: José María Arturo Huerta, Jaral de Peñas, Barralva, La Joya, Xajay y Santa María de Xalpa. PESOS: 382, 360, 388, 392, 420 y 376 kilos.
HÉCTOR GABRIEL (blanco y oro) Al tercio tras aviso, al tercio y oreja en el que mató por Sescosse.
ROMÁN MARTÍNEZ (tabaco y oro): Silencio y palmas tras dos avisos
MARIANO SESCOSSE (marino y plata): Ovación en el único que mató.
INCIDENCIAS: Se celebró el 45 aniversario de la inauguración de esta plaza. Mariano Sescosse sufrió esguince de vértebras cervicales. Román Martínez sufrió desgarre en la pantorrilla derecha. La plaza de toros celebró 45 años de vida.
César Daniel Morales, se presentó como picador profesional a los 15 años y con ello inicia un ciclo en la vida de la Familia Morales que lleva ya la tercera generción y es el sexto piquero en abrazar el oficio.
Y sí bien le ganaron los pechos del caballo, estuvo muy torero el piquero mexicano.